
Al frente del estudio está Raquel, quien ya desde muy pequeña sentía la necesidad de crear diferentes espacios, cambiando de sitio continuamente, los muebles de su dormitorio. Una afición que con el paso de los años se fue convirtiendo en su pasión.
Trabajó para otros estudios hasta que en 2016 decidió dar un giro a su vida y tras la reflexión de "renovarse o morir" nació su estudio KELE VOY A HACER.
Un proyecto que comenzó desde cero y al que dedica toda su energía.
Es muy sociable y le encanta conocer a gente lo que hace que el trato con ella sea muy fácil. Siempre aplica la empatía en todas sus acciones y proyectos para que sus diseños estén totalmente adaptados a las necesidades y gustos de sus clientes.
Trabaja por pasión y eso se refleja en todos y cada uno de sus proyectos.